jueves, 20 de agosto de 2015

El verano en la ciudad. No el evento, digo, de verdad me quedé atrapada aquí...

2 comentarios:
Y digo atrapada porque así me sentí. Es que mira, no me había dado cuenta de lo mucho que necesitaba salir de la ciudad hasta que no pude hacerlo. Esta ocasión, digo. Hablo de las vacaciones, digo.

A las personas que veo en mi día a día ya les había dado indicios de esto pero no lo había dicho mucho porque es como aceptar que es una realidad. Lo que voy a decir a continuación no lo digan a mi madre, por favor: pero detesto esta ciudad. Y a veces, incluso. me arrepiento de haberme mudado aquí. Y lo que fue una p***da es que este es un sentimiento que se pegó a mi verano muy cerquita y muy fuerte y no se fue en ningún momento.

Que sí, que mira, que es muy bonito todo y la arquitectura y los eventos, y tanta gente interesante y toda la pasión por la cultura. Ya sé, que por eso me mudé aquí en primer lugar. Pero yo ya no estoy segura de nada. Y pa' donde voltee yo no veo nada de esto; yo veo tránsito congestionado y demasiada gente y ruido todo el tiempo y más cemento del que debe ser sano y, oye, huele mal, la ciudad, así en general, uno no se da cuenta pero fue una de las cosas que me pegó muy fuerte la primera vez que vine aquí. Intentar respirar como solía hacerlo cuando estaba en la costa y atascarme con el aire demasiado seco y que no olía al aire que yo conocía, pero tampoco a algo que yo pudiera identificar. Yo sólo supe que no me gustaba y ya.

Y ya me gustaría poder trasladarme en patineta o en bici, pero por donde estoy ni se puede, y está todo tan irregular y empinado que ni me lo planteo. Y mira, ven aquí, no, aquí, parate aquí. Estamos bastante alto, ¿ves la ciudad? Por supuesto que sí, ¿pero ves algo más? ¡No tiene fin! ¡Nunca acaba! Bueno, sí, que lo compruebo cada que salgo pero como estoy ahora, me cuesta creerlo.

Y más que detestar esta ciudad, detesto que todo esté tan centralizado en este país, que si quieres buscar oportunidades decentes, tienes que sumarte a la locura caótica que son las grandes metrópolis. Porque por más bonita que esté la veracruz (que yo ya he decidido que es de género femenino), se está yendo al carajo. Bueno, muy lentamente, porque lleva en ese proceso desde hace años. Y mira, no es por el mar, ¿ok? Que sí, que yo tengo algo con el agua, pero no es sobre vivir en la costa de lo que hablo. Que yo ya he vivido en norte y sur y centro y los amo a todos, siempre y cuando sean tranquilos.

Y todo esto es una exageración pero es que esta ciudad misma es una gran exageración. Y me estoy ahogando. Y me estoy ahogando y nadie envía ayuda. Y no me mires así que yo se que tú piensas lo mismo, pero oye, dices, no es para tanto, dices.

Por el momento, termino lo que ya empecé, y le saco todo el jugo a este sitio, que ya estoy aquí, caray. Y tengo mi orgullito, por eso no vayan a decirle a mi madre, que me manda el boletito sin vuelta enseguida.

Podría seguir así durante horas pero no hay necesidad de atosigar. Ya ha sido suficiente. Ya levanten todo que yo ya no pienso decir más.

Por ahora...

Y probablemente mañana cambie de idea.

Sprawl II


Y alguien ya lo dijo mejor que yo. Bueno, lo cantó.

Soundtrack: